sábado, 9 de octubre de 2010
PALABRAS Y HAIKUS EN RECUERDO DEL CHE
COMANDANTE CHE ----------- (9 de octubre de 1976) ---------
Amanece en el altiplano. La intrincada selva boliviana se despereza y se esponja con los primeros rayos de sol. Los chillidos de los pájaros se mezclan con el clamoroso rumor de la torrentera.
El grupo guerrillero descansa. Allí, en la profundidad del barranco, en un refugio natural, casi inaccesible, creen estar seguros.
La caminata de la noche ha sido dura, por senderos tortuosos, enmarañados de salvaje vegetación. Y todos están agotados. La tos del comandante no altera el profundo sueño de sus hombres. Y el Che Guevara sueña despierto.
El hombre que luchó junto a Castro en Sierra Maestra, que sembró de revoluciones toda Sudamérica y sería ejemplo de miles y miles de jóvenes en todo el continente, está rendido y triste... Había soñado que esa zona despoblada y pobrísima de Bolivia, sería la ideal para su táctica de guerrillas. Pero se había equivocado. El ejército, con la inconsciente colaboración de los indígenas, ha logrado capturar y ejecutar a muchos de sus hombres. Y los sobrevivientes, vagan sin rumbo fijo.
De pronto, miles de pájaros huyen en frenética desbandada: Un grupo de soldados armados, irrumpe bruscamente en el refugio. Sin tiempo para reaccionar, los hombres del Che, van cayendo uno a uno. Y él, es capturado y conducido a La Higuera ante la mirada temerosa y culpable de los indígenas que se vendieron al poder y traicionaron al hombre que había renunciado a todo por ellos.
Los servicios de inteligencia USA, se regocijan: La operación ha sido un éxito. Muerto el Che, el peligro de revolución se desvanece... Tranquilos, ¿ qué saben esos ignorantes campesinos de libertad, dignidad y derechos humanos?...
Y en tanto el mito, delgado, sucio, con el torso desnudo, acribillado a tiros, abraza el infinito. La revolución que él soñaba, no se ha realizado.
Ahora, cuarenta y tres años después, los indígenas del altiplano, lo llaman San Ernesto de La Higuera... ¿Tal vez han entendido al fin, que el Che murió por ellos?
Y todos los años, contemplan con asombrada ingenuidad, la multitud de peregrinos de todas las partes del mundo, que invade la zona para visitar y dejar mensajes en su tumba.
Pero ellos, siguen siendo pobres, explotados y ya, ni siquiera son rebeldes...
************
HAIKUS ( para los indios bolivianos)
El cóndor pasa.
El lamento del indio
se va en su vuelo.
Ruinas. Distancia.
Despojada, desnuda
la Pacha Mama...
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todo sigue igual :( que narices hay que hacer para que algo cambie
ResponderEliminarme voy indignada a dormir :( siempre los mismos pagan
Besicos Soco muchos
Querida Luisa. En aquellos años, yo estaba segura que cambiar el mundo era posible...
ResponderEliminarseguimos soñando?
Buenas noches, cielo.
yo lo sigo soñando ;)
ResponderEliminarincluso a veces tengo delirios y pienso siiiii
ea me voy a soñar en la cama
buenas nochesssssss
Querida Soco, los ideales de esos años siguen vivos en los que continuamos soñando sin perder el camino de los sueños, desgraciadamente por ese camino muchos cambiaron los sueños de libertad con sueños de omnipotencia, pero algún día realizaremos estos sueños.... al menos, así espero.
ResponderEliminarBesos soñadores para ti.
Me sumo, Soco, a la apreciación de Leonel. El sueño, la utopía no morirá jamás. Pero es preciso refundarla y encontrar nuevas formas y nuevas fuentes de inspiración, porque aquellas que fueron parte de nuestras juventudes están agotadas y en el peor de los casos, desprestigiadas y obsoletas. No es el hipercapitalismo globalizador e imperialista la respuesta a los problemas de la Humanidad. Tampoco lo son los regímenes totalitarios y populistas de izquierda que, traicionando ideales y promesas, pretenden eternizarse singularmente en el poder por dinástico y faraónico decreto. Un fuerte abrazo. Un día, sucederá. Ojalá pudiéramos verlo.
ResponderEliminarEl Che es un personaje fascinante. No conozco lo suficiente su biografía como para tener una opinión plenamente formada sobre lo que hizo. Tengo la intuición de que se equivocó en muchas cosas; pero nadie puede negar que tuvo una historia fuera de lo común. Me gusta que te hayas acordado de este aniversario y los haikus que nos regalas son exquisitos.
ResponderEliminarTe dejo un soneto que quizás pudiera tener algo más de sentido un día como hoy, quizás se descuadren algunos renglones, lo siento:
Se levanta el coloso no vencido;
ni lamento ni queja en él se encierra;
la rodilla que, fuerte, hinca en tierra
de elevarle es capaz con un chasquido.
Está de pie el guerrero y un aullido
avisa al mundo. ¡Vamos a la guerra!
Ya brilla el cielo de una a otra sierra;
contempla con ternura aquel latido
que la madre natura les regala
como beso enlutado a los poetas.
De una sonrisa el cielo hace gala
y la luz atraviesa altas grietas.
De la ira olvidado, ve la bala.
Sabe ahora que somos marionetas.
No sé bien por qué, nunca fui adepto del Che. Bueno en realidad si lo sé; el “foquísmo” me parecía una teoría surgida del idealismo pequeño burgués (para hablar como en aquella época) y que solo podía acabar en catástrofe, militar o política (versus Cuba)
ResponderEliminarNo obstante, es cierto que participaba de aquel ambiente, que mezclaba en un todo dinámico, las guerrillas, la guerra del Vietnam, el flower power, la contestación social, la liberación sexual y que se yo que mas… Ambiente en el cual todo parecía posible; la gente no tenía miedo de nada y eso era formidable. Por lo menos el Che no fue un radical de salón y nada más que por eso tiene mi respeto.
Gracias a ti por recordarlo y por estos hermosos haikus.
Besos
Triste historia, real por desgracia. Aquellas ansias e cambiar el mundo, de hacerlo más justo, quedaron malheridas con la muerte del Che.
ResponderEliminarTu relato es literariamente magnífico.
Los sueños libertadorios del Che,siguen vivos en el pueblo por el cual luchó, y en los pueblos que tocó con su presencia aunque lo hayan entendido a destiempo. Los sueños no se acaban...continúan.
ResponderEliminarUn gran abrazo
Tampoco conozco suficiente sobre la historia del Che. Lo conozco como un símbolo de la libertad y la rebeldía ante la injusticia.
ResponderEliminarSin entrar en valoraciones políticas, admiro esos ideales y esos sueños,
que ojalá, como dicen los anteriores comentaristas, se lleguen a cumplir.
Me gusta, sobre todo el final del texto, y los haikus magníficos.
Besos. Osvaldo
No sé con qué quedarme hoy, si con las palabras o con los haikus. La última frase de esas palabras lúcidas es de las que habría que escribir y escribir para que no se olvide: ya, ni rebeldes.
ResponderEliminarGracias or el recuerdo, amiga Soco, algunos seguimos siendo... lo que sea. Bueno, Amadeus explica muy bien aquello; y yo no me arrepiento.
Muxu
SEGUIREMOS SOÑANDO POR LLEGAR A CONSEGUIR UN MUNDO MAS JUSTO Y MAS HUMANO,UN TEXTO PRECIOSO Y TERRIBLE,
ResponderEliminarLOS HAIKUS MARAVILLOSOS.
Acá recordamos al Che porque está en el corazón de las personas que están contra la injusticia...
ResponderEliminarGracias a vos por sumarte al recuerdo.
Gustavo
Siempre será un mito, aunque quieran destriparlo. Al fin y al cabo, ¿qué es la vida, qué es la historia? ...desde luego yo no tengo la respuesta.
ResponderEliminarBesos para ti, of course
El miedo y la ignorancia...ademàs del hambre que sabe untar la mano del desesperado...
ResponderEliminarHermosìsimo recuerdo para una figura mìtica, insospechada creo yo,para el mismo...
un càlido abrazo
Soco con permiso cuando puedas pasate por volando ;) igual me matas
ResponderEliminarGracias por el recuerdo
ResponderEliminarGracias comandante Che por enseñarnos el camino.
Bellísimos haikus y maravilloso y emotivo texto de recuerdo al Che.
ResponderEliminar¿Se llegarán a realizar sus sueños?...
Un ser único, no me extraña que en tantas paredes siga su poster aún colgado “si avanzo seguidme, si me detengo empujadme, si retrocedo matadme”
ResponderEliminarLo que encumbra a este gran revolucionario fueron sus últimas palabras antes de ser fusilado: “no desobedezcas la orden de un superior y mírame a los ojos que vas a matar a un hombre”
Quien no le admire le debería respetar.
Besos
Soñar no cuesta nada, pero tal como va el mundo no creo que tenga arreglo y que lleguen a cumplirse esos ideales de justicia y derechos humanos por los que luchó y murió el Che.
ResponderEliminarGracias y abrazo, Soco.
Manu
Este día 9, se ha estrenado acá una nueva película documental, que según me dicen muestra una imagen poco conocida del Che, su condición mas humana.
ResponderEliminarHa sido premiada en el festival de Montreal. Iré a verla lo mas pronto que pueda.
Ya sabés que acá lo adoramos al Che.
Gracias a vos y abrazos de primavera. SU
También fue mi gran ídolo de jovencita. Pero con los años una aprende que todos los extremos son malos y que las guerras, guerrillas y avanzadillas no sólo nos alejan de la paz mundial sino que además dejan graves secuelas psicológicas en la mente de aquellos que han presenciado tanto horror.
ResponderEliminarUna interesante entrada muy bien narrada.
Besosssss.
No sé casi nada del Che, pero me ha gustado mucho lo que escribes y como lo escribes, ese final tan bien logrado. y los haikus preciosos.
ResponderEliminarAbrazos de siempre.
Marta
Lo cierto es que El Che fue capaz de dar su vida por unos ideales, aunque fueran irrealizables...
ResponderEliminarMerece mi admiración y mi respeto.
Saludos.
Nuestro ídolo de aquellos años, Che Guevara...
ResponderEliminarPoco a poco se fueron perdiendo los sueños y llegando la desilusión y el conformismo...
Un placer saludarte. Carlos