Laberinto
La nada.
El antes y el después de la nada.
El espacio.
El misterio del tiempo.
La mágica aventura de la vida
Los recuerdos que llegandelayer
-y tal vez del mañana-
El después de la muerte.
La razón de vivir. Elporquédequererte...
Dímelo tu, conoces la salida?...
Muros
No puedo entender
por que ahora, y en mi país
se habla tan mal del muro de Trump.
Acaso no es un muro
las alambradas con cuchillas,
que impiden cruzar nuestra frontera?
No son la misma vaina
-que diría Gabo-?...
Yo a eso, lo llamo hipocresía.
Y detesto los muros
sean de alambre, acero u hormigón.
Escríbeme
Es medianoche,
y no sé lo que quiero.
Dormir? Soñar?
Escribir un poema?
Dime algo, amor,
Ven. Siéntate aquí conmigo.
Un gin-tonic? café?
Solo un abrazo?...
Escríbeme una nota.
Anda... Escríbeme untequiero.
ResponderEliminar!Cuanta belleza querida Soco! Me enamora siempre tu poesía, tu mirada certera y sabía, tu sentimiento... Tres momentos, tres magníficos mensajes.
Tres abrazos
El momento MUROS es tan auténtico como tú. Bellos y sabios tus pensamientos Soco. Fuerte abrazo.
ResponderEliminar
ResponderEliminarJ'aime beaucoup cette tendresse. Bisous.
ResponderEliminar"Anda...Escríbeme untequiero"...
Gabon ta musumila
Cada momento pero en especial el primero me han conmovido. Tal vez por identificación en cuanto a temática, digo... Pero la idea de que las grandes preguntas que los humanos nos hacemos desde el fondo de los tiempos son un laberinto es maravillosa. Nos hacemos esas preguntas y pese a las respuestas que venimos dando por los siglos de los siglos no encontramos la salida a cada interrogante.
ResponderEliminarAbrazo, Soco.
La mente y el corazón mano a mano entre tus versos...Ahí estamos todos, tratando de encontrar ese equilibrio entre la idea y el sentimiento, mientras vislumbramos el misterio de la vida...
ResponderEliminarMi abrazo y mi cariño, Soco.
M.Jesús
Tres bellos poemas donde el lector se ve reflejado en uno u otro verso. Maravillosa imaginación de poeta que vive la actualidad y sufre, no sólo por lo propio, también por la sociedad qu nos rodea.
ResponderEliminarmariarosa
La belleza siempre anida en tu espacio, entre recuerdos del ayer y esos muros que aprisionan la libertad. Mientras dejas que el alma se ponga a soñar para que los bellos momentos se sienten a tu lado prendido a un tequiero…
ResponderEliminarSiempre mi cariño y un cálido abrazo Soco
Cada poema es precioso y de una de belleza entrañable, que me gusta.
ResponderEliminarMe quedo por aquí, para seguir leyendo.
Muchas gracias por tu visita.
Besitos de luz
Qué suavidad para decir, pero también qué firmeza y convicción.
ResponderEliminarTres momentos tuyos que se quedaron conmigo.
Besos, Soco.
ResponderEliminarAsí es tu poesía, Soco. Es suave, profunda y casi tan dulce como tu.
Besos y tequieros.
Hola Soco; vengo a agradecerte tu comentario. Me ha emocionado.
ResponderEliminarMis personajes van surgiendo de una realidad a la que yo le agrego mi imaginación. "La niña del subte" es real, a cierta hora de la noche, los trenes de vienen de Retiro hacía el suburbano, traen niñas y mamas cargadas de bolsas que retiran de las panaderías céntricas.
Y "El duende de los libros" nace de un personaje verdadero que encontré en una libraría de Bariloche. Los diálogos, fueron reales, lo demás es pura imaginación de cuentera.
Un abrazo.
mariarosa
Yo quisiera soñar pero ya no soy capaz.
ResponderEliminarUn abrazo.
Besos.
Yo quisiera soñar pero ya no soy capaz.
ResponderEliminarUn abrazo.
Besos.
ResponderEliminarSi, son la misna vaina, y la misma hipocresía. , Me encantan los tres, pero eso ya lo sabés.
Abrazo porteño
ResponderEliminarSinceros y directos, de lo espiritual a lo terrenal. Y siempre con esa sencillez y ternura tan tuya.
Mi abrazo, poeta
Lo que daríamos por un tequiero de verdad...
ResponderEliminarBesos.
Es toda una trilogía poética Soco. Muy bonita. Un fuerte abrazo y buen fin de semana.
ResponderEliminar
ResponderEliminarMi café sabe hoy a Universo, a mundo desquiciado y a corazón.Gracias, siempre por el regalo de tu poesía.
ResponderEliminarPienso igual que vos. Por eso me cautiva leerte.
Abrazo desde un tórrido Baires.
la vida toda es ese sentido...el momento
ResponderEliminarno hay de otra
somos el compendio artesanal de un instante consciente
enhorabuena Soco, tus poemas siempre dejan buen sabor de boca
abrazos de sol :D
Hola Soco.
ResponderEliminarSoy Maricarmen C. Me encantó escucharte recitar el pasado mes de diciembre en el Altxerri.
Espero enterarme cuamdo vuelvas. Es preciosa tu poesia.
Saludos y abrazos. Maricarmen
Los laberintos siempre nos llevan a una espiral.
ResponderEliminarEn cuanto al poema del muro, qué verdad. Y mucha hipocresía y olvido, que Clinton ya empezó a construirlo.
Y terminando: un te quiero mejor que nada.
Besos, Soco.
La magia de la vida que está hecha de pequeños instantes, de algunos recuerdos que la memoría selectiva se encarga de perservar, de intuiciones de futuro que mantiene engrasada la esperanza.
ResponderEliminarUn te quiero y la soledad se habita de golpe.
Los muros con cuchillas, los simples e ineptos, a los que muchos les dan carta blanca con su voto, la zafiedad por encima de la sutileza, el desprecio a la cultura, los jóvenes sin futuro, los empleos por días, los sueldos de miseria... De todo eso tenemos en casa, y mucho.
Me quedo con tus hemosos versos, Soco, con tu sensibilidad que siempre me conmueve.
Muchos besos,
ResponderEliminarCada vez que me acerco encuentro mas belleza y mas emoción. Tus poemas abrazan.
Un montón de besos.
Cuánta cercanía en estos versos que envuelven el alma.
ResponderEliminarLa poesía como eje para enfrentarlo todo; la vida es eso: un ir y venir de secuencias divididas.
Belleza total.
Besos mi querida amiga.
SIEMPRE ENLAZADA con la vida...con sus luces y sombras.
ResponderEliminarcariños SOCO.
Tres poemas que se conectan: la nada, un muro y un escríbeme.En los tres hay angustia: en el primero el descifrar el enigma de la nada y la existencia del mundo y las cosas. Un vacío que se llena, quizás con el mismo amor conque pide a su otra parte que resuelva la incógnita?. En otro, el muro, angustia humana por la hipocresía. Aquellos que se duelen del muro de Trump, también ponen muros, tapias, valladares para separar el amor. Y ese escríbeme, una bella angustia por una respuesta epistolar, como en los bellos tiempos de las cartas que uno esperaba abrir con el corazón al punto de eclosionar. Un abrazo. Carlos
ResponderEliminarGracias a todos por vuestras bellísimas palabras, siempre tan generosas. Os quiero.
ResponderEliminar