Solamente, una vez en mi vida,
asistí a un velatorio:
La mamá de una amiga.
Éramos casi niñas.
Rostros graves.
Voz baja.
Susurros.
Y en el cuarto del fondo
-tapados los espejos y las risas-
muchas flores, los cirios y la muerte.
Lentamente,
ascendieron de tono las palabras:
Uno contó una anécdota.
otro aventuró un chiste
y la risa corrió, a borbotones.
Mi amiga y sus hermanas,
totalmente vestidas de negro,
repartían bebidas y dulces
y poco a poco
se unieron al "ambiente"
Yo -lo recuerdo bien-
me apené muchísimo...
Pero, luego pensé: Por que?...
La mamá muerta,
será mas feliz si las ve alegres.
viernes, 26 de mayo de 2017
domingo, 7 de mayo de 2017
Ellos
El tímido.
El solitario y triste.
El que me miraba
siempredelejos.
El que me envíaba
notas en clase.
El adulador.
El tan bien vestido.
El que me comparaba
con elaguaylasflores.
El que tocaba el saxo,
en la vereda.
El que se fue a la mar.
El que me rescataba
entre la gente
cuando sonaba un tango...
El que me protegía.
El tan experto en filosofía,
Ese que se creyó
que era mi dueño.
Aquel de ojitos dulces
que tanto me gustaba.
El del primer amor,
con olor a tabaco
y aquel que nunca fue
y yo añoraba... tanto.
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