Los Románticos ya sostenían, que cualquier manifestación del arte es, fundamentalmente, un ejercicio de comunicación.
La poesía es pues, esencialmente, comunicación. Ser capaz de que el lector reviva idénticas emociones, a las experimentadas o imaginadas por el poeta.
La poesía es sin duda muchas cosas a la vez, pero cuando un poema es capaz de hacernos explorar nuestros sentimientos, podemos afirmar que la poesía es la materia ideal para llenar la vida, o al menos, para hacerla mas hermosa.
UN POEMA DE JORGE G. ARANGUREN
XXXV
Pastor de luna o luna de pastor.
Entre los cirros ahilados que preludian la noche,
con su gota de azúcar, con su leche de cántara,
el aire dulce, todo.
Primera estrella y su deriva.
En la deriva, la primera estrella,
todo el dulce del aire,
la cántara de azúcar, con su gota de leche,
preludiando los cirros que deshila la noche.
El aire todo dulce;
con su azúcar en cántara y su leche de gotas,
se preludian los hilos en la noche de cirros.
La primera deriva de la estrella.
Con su leche de azúcar, con su cántara en gotas,
se deshilan preludios en los cirros de noche.
La estrella que deriva es la primera.
Todo su aire, dulce.
Luna de pastor,
o pastor de luna.
Magnífico, Jorge. Ingeniosa danza de palabras en la magia de la noche.
lunes, 14 de julio de 2008
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