Hay nubes que parecen
dragones escarlata,
allí,
donde el crepúsculo.
Son
estas tardes de otoño
casi azules.
Aún tibias.
La niebla
deambulando por los parques.
La luz
descarrilando en las veredas.
las hojas desahuciadas,
que cubren
de ocres ideogramas,
caminos y veredas...
-Que exacto este silencio-
En la plaza, los árboles
mastican soledad.
Se le van yendo las hojas,
los gorriones.
Los niños
y los enamorados.
La ciudad
desemboca en el mar
ensimismada.
Las farolas sonámbulas,
van ya
anunciando el frío.
Y en cada ventanal
aterriza un deseo
y una estrella perdida.
Son,
estas tardes de otoño
casi azules.
Y aún tibias...
Hola Soco. Hay tardes de otoño que son un placer para escribir y mirar las plazas cubiertas de hojas, vacías de niños y enamorados y donde tú captas imagenes y escribes poemas. Un abrazo.
ResponderEliminarmariarosa
Admirable ese ritmo, esa musicalidad siempre en tus versos. Que belleza, Soco. Gracias por tus regalos. Manu.
ResponderEliminarHermoso poema... A mí el otoño me derrota, pero en tu poema me gusta mucho...
ResponderEliminarAbrazo
Este poema me hace pensar, una vez más, en la fragilidad de nosotros. Cómo nos influye cada estación, cómo establecemos puentes con ellas, en este caso con el otoño y encima a través de un poema. Hay mucho de animistas dentro de los individuos. No residuos ni ecos ancestrales, sino vínculos con la naturaleza materia. Los objetos, los quehaceres y las formas de vida, aderezado todo ello por una amplia y tosca modalidad de ideología, juegan el papel de muros o distancias respecto a lo natural. Bienvenida la expresión que encuentra la reconciliación y el matrimonio con los ciclos de la vida.
ResponderEliminarCon todas las flores de la primavera porteña. Fernando
ResponderEliminarEsas tardes de otoño son inspiradoras, Soco...Me encanta la calma genuina y mágica que nos dejas en tus letras, nos abraza el alma de belleza, amiga.
ResponderEliminarMi abrazo entrañable y mi ánimo, compañera poeta.
Feliz otoño, Soco, y felices otoñales versos y besos...
ResponderEliminarComo siempre, enamorado de tus versos. Pura delicia.
ResponderEliminarJose.
precioso otoño Soco
ResponderEliminargracias por tu huella, besitos :)**
Yo estoy hecho de otoño.
ResponderEliminarEl poema es un análisis de mi sangre.
Besos escarlatas.
Y para tu mágico otoño, todas las flores de mi primavera. Fernando
ResponderEliminarSiempre he admirado en tus poemas, el adecuado ritmo que le imprimes a cada verso. Fluyes sin dificultad y, circulan tus letras por el alma y llegas. Siempre llegas a provocar belleza.
ResponderEliminarBellísimo Soco. Mis felicitaciones.
Besos
Toujours, toujours, avec mon amour.
ResponderEliminarPaul
Son tardes de otoño que, acompañadas de tus poemas, endulzan la época...
ResponderEliminar¡Añorado otoño!
Gran abrazo Soco. Bonito finde.
Maravilloso danzar de pensamientos hecho verso y una esperanza en cada uno. Saludos
ResponderEliminarMe encanta este poema, "los árboles mastican soledad, las farolas sonámbulas," me parece precioso, gracias Soco por escribirlo, lo he disfrutado un montón. Abrazos.
ResponderEliminarY con cierta sensación de soledad, acaso necesaria.
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